Orisha Shango: el dueño del rayo y del fuego

Orisa (Òrìsà) del rayo y el trueno, de la valentía y la fuerza, representante máximo de la virilidad masculina. El Orisha Shango (Sàngó) es uno de los más importantes de la religión yoruba y también uno de los más conocidos y populares en el mundo.

De acuerdo con la creencia yoruba (Yorúbá), existen dos Shango (sàngó), pero solo uno de ellos es orisha: el que fue enviado por Olodumare a la tierra en el momento de la creación, dotándolo del poder del rayo y del trueno. El segundo fue el primer seguidor del Orisha, conocido como Sàngó Tèlla-òkò yo el tercer Alàáfin, cuyo título es recibido por el rey de Oyó, que hasta hoy asume la representación de Sàngó en la tierra.

En la historia yoruba, Sàngó Tèllà-òkò era un fuerte guerrero y se le consideraba una reencarnación física del Orisha Shango (Sàngó), debido a sus poderemos míticos usados mediante la energía del rayo y de las tempestades. Era el hijo de de Òrànmíyàn con Tòrosí de la ciudad de Tapa; el fundador de imperio de Oyó, el más joven de los nietos de Odùduwà. Él era un hombre valiente y poderoso que heredó la mayoría de sus habilidades especiales de los Nupe, el pueblo de su madre.

En su vida, el tercer Alàáfin tenía cinco esposas, pero solo tres eran más cercadas a él: Obá; Osun y Oda, la más próxima; esta última era un espíritu, que tenía el poder de transformarse de humano a animal y también el poder de convocar tempestades y vientos huracanados. Así, junto con los rayos de Sàngó, tuvieron excelentes victorias en batalla.

Orisha Shango en Kòso

Según la leyenda Yoruba, Tèllà-òkò desapareció en Kòso después de desapareceu em Kòso después de batizar la tierra y dejar atrás el rayo retirado de su propio cuerpo. Hoy Kòso es un distrito urbano de Oyó, uno de los lugares más sagrados de la ciudad, donde el espíritu de Sàngó habitaba miles de años atrás. No existe Aláàfin en Òyó que sea coronado sin realizar todos los ritos de coronación dentro del templo de Kòso. El Mogbà Kòso desempeña un papel crucial en la sucesión real, pues es el guardián del antiguo santuario de Sàngó Kòso y La Corona ancestral de Sàngó, siendo responsable de la coronación del nuevo rey.

Todos los años, el Elégún Sàngó Kòso, la encarnación viva del Orisha Shango (Sàngó), simbolizando la inmortalidad espiritual, se presenta en el templo de Kòso en el último día del festival anual de Sàngó- De acuerdo con el rito de las celebraciones, el Elégún Sàngó Kòso recorrerá la ciudad presidido por el Babalorisa y acompañado por los seguidores y a medianoche seguirá en dirección al palacio del Aláàfin, momento en el que el rey y todas las personas que tengan un título en el palacio deben dejar el local porque en aquel momento el Orishas está presente y él es el único rey de Òyó ese día.

Con motivo del día más importante del día más importante de este Orisha en Oyó, hoy en Ifá Tradicional Pro y en Ojú Odù, hay información especial sobre su representación y algunos materiales para su propiaciación, además de un versos especial e imágenes exclusivas de la presencia del Elégún Sàngó Kòso hoy en Òyó.

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